13/6/14

La autoatención

Me gustaría empezar esta entrada con una frase que resume muy bien el motivo de la misma. Cuidarse uno mismo es la mejor manera de cuidar a tú familiar.

Hoy haré referencia al término "Autoatención", es decir a todas aquellas acciones y actitudes que el cuidador adopta en el proceso de cuidar al dependiente y que van encaminadas a valorarse a uno mismo, a cuidarse y sobre todo a quererse. Resumiendo, son todas aquellas acciones que hacen que el cuidador sepa valorarse y el objetivo de éstas sin duda es mejorar y mantener el nivel de salud física pero también emocional del cuidador.

Algunos signos emocionales que seguro pueden aparecer durante esta etapa cuidadora son: pensamientos erróneos, insomnio, soledad, aislamiento, problemas físicos, ansiedad y depresión entre otros.

De manera particular y desde hace mucho tiempo (años) sigo la evolución de un caso de dependencia que me toca muy de cerca y puedo afirmar que la persona a la que me refiero, a la cuidadora que yo veo y quiero nada tiene que ver con la persona que era antes del inicio de su etapa cuidadora. Es triste decirlo pero así es. Al inicio de su etapa cuidadora era una persona alegre, activa, motivada por muchas cosas que poco a poco ha ido derivando en otra persona sobre todo emocional y socialmente. Identifico claramente cada una de los signos que he mencionado anteriormente, veo día a día como estos signos se acentúan más si cabe y la gente de su alrededor no podemos hacer nada.

He visto como desde un principio y de forma paulatina se ha ido aislando de todos y de todo, me refiero a sus familiares más directos o su circulo de amistades, sin ganas de salir porqué no puede ni quiere aunque le ofrezcas alternativas para que otra persona (yo misma u otro familiar pueda quedarse con la persona dependiente), su percepción es errónea al pensar que ella es la única que puede hacerse cargo del dependiente, (ella lo siente así y así lo manifiesta). Os podéis imaginar lo que comporta todo esto, después de tantos años su fatiga es tan grande a nivel físico; no duerme bien, no puede hacer cosas que debería hacer para garantizar su salud (caminar), no tiene casi tiempo para ir al médico para ella etc, sus relaciones de pareja han experiementado un cambio rádical y a nivel emocional, su dependencia hacia el dependiente es tal, que aveces me abruma y pienso que pasará con ella cuando esto acabe. No sabe vivir sin hablar del dependiente y todo su universo se centra en el cuidado de esa persona.Todas las conversaciones acaban o giran en torno al dependiente y si le hablas de otro tema se dispersa.

No quiero cansaros con más descripciones tristes, simplemente doy fe del cambio que puede suponer para una persona el ser cuidador de otra totalmente dependiente, sin olvidar los daños colaterales que vive el resto de la  familia (de esto hablaré en otra entrada y del papel que juega la mediación en ello, familias que deben mediar para encontrar una solución ante un caso de depencia en la familia) 
 
Quiero pensar (aunque no sé hasta que punto es cierto) que realmente ellas (las personas cuidadoras) se sienten bien haciéndolo y que realmente han sido libres a la hora de elegirlo. Digo que no sé si será cierto, porqué tengo la sensación que lo sienten aveces más como una obligación, "es lo que toca hacer y me ha tocado a mí" que como una libre elección (al margen de las situaciones  personales de cada familia: económicas, personales etc).

Tengo la convicción de que la actitud de muchos de los cuidadores ante tal carga, responde mucho a una cuestión generacional y educacional. Sin duda alguna, mi generación y la de los actuales jóvenes no tiene esa percepción de obligación ante tal circunstancia (pero sí el respeto y la ayuda, por lo menos yo lo creo así) , que tienen generaciones antañas, en qué ya se daba por hecho lo qué se iba a hacer y quien iba a hacerlo si había tal circunstancia.

Para acabar y al hilo de la entrada de hoy, mi más sincero reconocimiento a los cuidadores de todo el mundo, la labor que hacen no tiene precio, sin embargo deben quererse más y dejarse ayudar para que todo fluya mejor y los cambios inevitables en su vida sean más llevaderos y sobre todo Cuidarse uno mismo es la mejor manera de cuidar a tú familiar.
 
 

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